La importancia del tiempo de respuesta en un sitio web no se puede menospreciar. Para los principiantes, Google y Bing tienen en cuenta la velocidad de un sitio web a la hora de crear sus rankings SERP. Además, los tiempos lentos de carga dan como resultado una mala experiencia de usuario y conducen a una alta tasa de rebote. Si quieres asegurarte de que tu sitio web sea lo más rápido posible, estos consejos de optimización deberían servirte.
Opta por un alojamiento web de primera
Un sitio web que está alojado en un hardware de baja categoría está condenado a experimentar un rendimiento mediocre. Es por eso que es importante elegir el mejor hosting posible. Opta por un proveedor que utilice veloces SSDs en lugar de desfasados HDDs. Asegúrate de que sus servidores tengan sólo las más recientes CPUs y memorias RAM de alta velocidad. Por último, elige un proveedor de hosting cuya red tenga una latencia baja y un gran ancho de banda.
Utiliza una plataforma CDN potente
Las páginas web modernas son tan grandes e incluyen tantos elementos diferentes que a menudo resulta difícil que un solo servidor pueda aguantar la elevada demanda. Una red de entrega de contenidos (CDN por sus siglas en inglés) ayudará a tu sitio web a obtener más potencia cuando sea necesaria para hacer frente a los picos de tráfico. Un buen CDN como CloudFlare o MaxCDN sólo cuesta unos dólares al mes para la mayoría de sitios web pequeños.
Usa la compresión en todo
Hoy en día, casi todos los navegadores soportan compresión gzip. Por lo tanto, tiene sentido habilitar esta funcionalidad en tu servidor. El módulo exacto del servidor que necesitarás instalar depende de si estás usando Apache, Nginx o IIS. Para los usuarios de WordPress, es tan sencillo como instalar un plugin gratuito. Los archivos CSS, los archivos Javascript y las imágenes deberían ser comprimidos lo máximo posible.
Haz de la memoria caché una prioridad máxima
Incluso los sitios web pequeños pueden beneficiarse enormemente del uso de la memoria caché para reducir la transferencia de datos. Activar el almacenamiento en caché del navegador es bastante sencillo. Una manera de hacerlo es editando el archivo .htaccess del servidor para que le diga a los navegadores que almacenen los archivos estáticos durante un periodo determinado de tiempo. Los usuarios de WordPress pueden simplemente instalar un plugin como W3 Total Cache.
Reduce la sobrecarga de la base de datos
Cualquier sitio web dinámico depende de una base de datos SQL para recuperar los datos y producir páginas web para los visitantes. Una base de datos mal optimizada es más lenta de lo que debería ser y puede reducir seriamente el rendimiento. Prácticamente todos los CMS del mercado tienen un plugin para hacer esto automáticamente. Para WordPress, algo en la línea de WP-Optimize se encargará de la optimización.
Reduce las solicitudes siempre que sea posible
Aunque los CDNs son una muy buena manera de entregar los muchos recursos individuales que conforman cualquier página web, no reducen el número de solicitudes HTTP. Existen varias maneras sencillas de reducir las solicitudes y el tiempo general de carga. Para los principiantes, usar CSS en lugar de imágenes para los diseños web siempre que podáis. También es importante combinar las hojas de estilo en un único archivo.
Optimiza la configuración de los archivos HTML
Cuando un navegador solicita un archivo HTML a un servidor, empieza a procesarlo desde arriba hasta abajo y muestra la página web a medida que avanza. Puedes usar esto en tu beneficio para reducir los tiempos de carga. Coloca tus archivos CSS arriba del todo en el encabezado. Coloca los archivos Javascript abajo del todo para que la página se muestre antes de que sea necesaria la funcionalidad interactiva. Hacer esto hará que un sitio web parezca más rápido de lo que en realidad es.
La eficiencia y la agilidad te pueden ahorrar costes
Acelerar los tiempos de carga de las páginas supone mucho más que mejorar la experiencia de usuario para los visitantes de tu sitio web. También puede reducir drásticamente los costes del servidor reduciendo la transferencia de datos y el espacio de almacenamiento. Para un sitio web de gran volumen, esto puede dar como resultado unos ahorros de miles de dólares al mes. Al final, un poco de optimización en el servidor puede suponer una gran diferencia.